Matando a Barcelona

Un nuevo día y sobre todo una nueva era se presentan ante nosotros como quien canta un nuevo comienzo -sobre todo en esta época de crisis-. Esa es la idea que nos ha transmitido este fin de semana The Killers en su gira por España con dos citas obligadas: Barcelona y Madrid.

En ambas el grupo de Las Vegas arrasó, el lleno estaba asegurado -de ahí los cambios de recinto en Barcelona y la nueva cita madrileña no contemplada en un primer momento- y no defraudaron; es más, partieron rumbo a Australia enamorados del público español, quien estuvo más que a la altura.

Brandon Flowers y los suyos saltaron al escenario y blandieron sus armas. Human fue la primera explosión; todo el mundo se convirtió en “dancers”. Los sonidos ochenteros de otros álbumes como Hot Fuss se han renovado tanto que la banda se ha lanzado a hacer sus propios ritmos. Electrónica a golpe de saxofón y reminiscencias tropicales como en I Can’t Stay, sin olvidar sus principios.

El new wave, principal influencia del álbum, se mezcla con el pop, el rock y el post-punk revival presente en todos sus trabajos anteriores. Las famosas Bones, The world we live in y When you were young fueron el chispazo final de un bis con toques de un pasado killeano hecho presente.